El 17 de septiembre se celebra el Día del Profesor, debido a cumplirse
el aniversario del fallecimiento de José Manuel Estrada, quien fue un
ejemplo de la docencia, tanto secundaria como universitaria. Sus ojos se
cerraron el 17 de septiembre de 1894, a los 52 años. Hoy, sus restos descansan
en el Cementerio de la Recoleta, su sepultura fue declarada monumento
histórico.
Día tras día, profesores se dirigen a sus lugares de trabajo para
enseñar a los adolescentes y jóvenes de nuestro país dejando huellas más allá
de aprendizaje sobre un área.
ACTIVA, SOCIEDAD EN ACCIÓN, conversó con profesoras de nivel
secundario, las cuales se refirieron a su trabajo.
Vanesa Morales, docente de las materias Tutoría y Proyecto y
metodología de la Investigación, expresó: “Ser profesor es una profesión que me
divierte y disfruto hacer cada día. Es poder acompañar a los niños y
adolescentes en su vida escolar, tratar de que las clases sean significativas;
pero, a la vez, entretenidas, aprender a escuchar y acompañarlos en todo
momento”.
“Hace poco leí una frase y recordé a mis maestros y profesores,
como ellos afectaron mi vida escolar”, dijo y trajo a colación dicha frase de
Sidney Hook: “Todo el que recuerda su propia educación, recuerda a sus
maestros, no los métodos o técnicas. El maestro es el corazón del sistema
educativo”. Finalmente, señaló: “Así es como me gustaría que me recuerden, siempre
como la profesora ‘copada’, que no solo dio la asignatura; sino, que les brindo
consejos para la vida”.
Por su parte, Carina Caputo, profesora de inglés, mencionó: “Ser docente ha sido una de las mejores decisiones que tomé en la
vida. Creo que Dios, ya lo tenía planeado para mí, antes de nacer”. Por último,
indicó: “Me enorgullece en gran manera haber elegido la profesión de Jesús, el maestro
de los maestros. Y mi deseo es siempre seguir su ejemplo de amor, servicio y
entrega”.
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